Barra distintiva de Masegoso vivo con una vista de Masegoso de Tajuña

Imágenes de Masegoso

La Vega de Masegoso de Tajuña

La Vega de Masegoso de Tajuña.

Huerto en Masegoso de Tajuña

Huerto en Masegoso de Tajuña.

Galerías

Se muestran aquí varias galerías fotográficas que ilustran en color y en blanco y negro los diversos aspectos del pueblo, su entorno rural, sus costumbres y su historia y la de sus habitantes. También dan testimonio de las muchas actividades culturales promovidas por la Asociación de Amigos de Masegoso, tanto las que se desarrollan en la actualidad como las del pasado, para constituir una memoria en imágenes en todo momento accesible de forma sencilla. Se constituye así un archivo de imágenes de gran valor como reflejo de un lugar, Masegoso, con innumerables facetas y posibilidades.

La presente sección del sitio de Masegoso Rural se debe al cariño y generosidad de los masegosanos y los visitantes del pueblo a lo largo de muchos años y esperamos que en el futuro se mantengan las aportaciones igualmente, porque este tesoro gráfico tiene la vocación de ser un archivo en continuo crecimiento: siempre se puede incrementar con las fotografías que aparecen inesperadamente en los viejos baúles o en las cajas de zapatos que habíamos olvidado largo tiempo en el fondo de un armario o en la cámara —no la de fotos, precisamente, sino esa pieza de la casa que se llama así en Masegoso y en otros lugares se conoce como pajar o sobrado o incluso altillo o desván— para devolvernos recuerdos muy felices de nuestras celebraciones o nuestra vida cotidiana o, a veces, llenarnos por dentro de nostalgia.

O puede crecer también este archivo colectivo con las fotos tomadas en esos recientes recorridos por los caminos y las laderas arboladas, cámara —esta vez sí la fotográfica— o teléfono móvil en mano, el último verano u otoño al atardecer, en el invierno ya algo más lejano y casi silencioso en el recuerdo o en la primavera de la infancia plena de colores limpios e intensos olores a espliego, a lluvia en la tierra... Esos recorridos al buen tuntún y paseos sin apresuramiento, en fin, en los que capturamos ese efímero rayo del sol que ya se pone por detrás de los cerros o las hojas caídas como una alfombra en la chopera a la vera del río, crujientes bajo la memoria de nuestros pasos y casi sonoras incluso en la fotografía, o nuestras huellas en la nieve esponjosa, recién caída una vez más.

Captan estas imágenes instantes breves, luces, reflejos en un muro de ladrillos de adobe o en el filo curvo de las tejas de un viejo y casi ruinoso corral en desuso, ramas desnudas mecidas suavemente o, tal vez, agitadas con furia por el viento, la impresión de olas sucesivas en un mar de espigas de cereal a punto de madurar, girasoles en su plenitud y alegría o ya cansados y cabizbajos e inmóviles en su saludo al amanecer, serenos surcos en la tierra rojiza y expectante, chispas de luz en las tranquilas y claras aguas del río, rostros de paisanos atentos o pícaramente juguetones o ensimismados y figuras que se alejan paso a paso, las nítidas siluetas de sus sombras alargándose sobre la carretera o la verde —y aún de breve talle— hierba otoñal... Véamoslo:



Hoy es

© Masegoso de Tajuña, 2018